La Calle Siete Culebras cuenta con muros de piedra que tienen tallada siete pares de culebras en alto relieve. Es una de las más reconocidas de la ciudad de Cusco, esta da paso hacia la Plaza de Armas, donde podrás disfrutar de todos los atractivos que ofrece.
Al ingresar a la calle, visualizarás un arco de piedra que decora el lugar, para después encontrar a detalle las catorce culebras que están grabadas en los muros, en esta parte notarás que la mitad de ellas tienen una mirada hacia la calle y las otras en dirección hacia la calle Nazarenas.
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Para llegar a la Calle Siete Culebras desde la Plaza de Armas de Cusco, puedes partir caminando porque esta se encuentra a tan solo cinco minutos de distancia. Te diriges hacia la Catedral de Cusco, para continuar por la Plazoleta de las Nazarenas, donde te encontrarás con el muro de las siete culebras.
La Calle Siete Culebras originalmente se conocía como "Amaru Ccatta", que se traduce como la Ladera de la serpiente, además se cuenta que en este sitio anteriormente era un manantial donde se hallaba un pastizal.
Según el historiador Víctor Andrés, esta calle se ubicaba dentro de "Pumacurco" (tronco para atar a los pumas) y a la vez pertenecía al Amaru Ccata, este punto limita con una estructura que era parte del Yachahuasi o espacio donde estudiaban los nobles del Imperio Inca, el cual estaba representado por el Amaru (serpiente).
La serpiente es de gran importancia para los Incas porque forma parte de su trilogía, la cual pone a este animal como la representación de lo infinito, el mundo de abajo o el de los muertos, porque cuando parten del lado terrenal se unen a otra dimensión que está representada con este ser. Para ellos también significa la sabiduría, el estudio y ciencia.
En la actualidad se nota a las catorce culebras talladas en los muros, estas son siete de cada lado a la par, convirtiéndose en una calle muy especial del centro histórico de Cusco.
Tiene este nombre porque es una calle que cuenta con la imagen en relieve de siete pares de culebras en las piedras del muro que respalda el lugar.
