El Perú es uno de los países que ha demostrado un gran sincretismo entre las tradiciones religiosas impuestas durante el periodo de colonización y las costumbres así como folklore que las civilizaciones precolombinas tenían.
Una de las muestras latentes de este sincretismo es sin duda la celebración del Señor de los Milagros, una fiesta de estilo religioso que hoy en día es considerada la más grande e importante del Perú.
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Según las leyendas populares y registros históricos, el 13 de noviembre del año 1655 acontece en lima un terremoto de gran magnitud que devastó a toda Pachacamilla, quedando solo en pie un muro de adobe que tenía pintado en él.
Un cristo crucificado flanqueado por un sol y una luna en la parte superior, aunque actualmente el autor de dicho mural es anónimo, se tienen algunas teorías sobre quién pudo haber realizado dicha pintura.
María Rostworowski, teoriza según escritos que datan del año 1651, que la pintura pudo ser presuntamente realizada por un esclavo negro proveniente de la casta de Angola que se instaló en Pachacamilla, según el folklore local la pintura tendría ‘‘divina providencia’’, ya que ante distintos milagros la población local adjudicaba a esta pintura un origen más bien divino.
Años después los pobladores locales, acudían ante este muro a realizar rezos y oraciones en medio de danzas y cánticos que no eran bien vistos por la iglesia, razón por la cual el promotor fiscal del arzobispado.
En el año 1671 da la orden de borrar la imagen por lo que entre el 6 y 12 de setiembre del mismo año el capitán de la guardia del Virrey y sus soldados llegan hasta dicho muro de adobe para llevar a cabo el mandato del arzobispado.
Sin tener éxito en la faena porque cada hombre que se acercara al mural con intenciones de borrarla, sufría de convulsiones y desmayos siendo este hecho tomado como obra divina; ante lo cual el mismo virrey en persona acudió a contemplar la imagen quedando maravillado y dando ordenanza de cuidar el muro y dándose inicio a la construcción de una capilla para la adoración de dicha imagen.
Durante 1678 se dan en lima una serie de temblores continuos, razón por la cual Sebastián de Antuñano ordena realizar un lienzo réplica del Cristo crucificado de Pachacamilla, lienzo que fue sacado en procesión durante uno de los temblores más fuertes el 20 de octubre del mismo año. Siendo este mismo lienzo el que es actualmente sacado en procesión durante el mes de octubre.
La celebración del Señor de los Milagros se realiza principalmente en la ciudad de Lima durante el mes de octubre. En las calles se vislumbran adornos como cadenetas, banderas, mantos y flores del característico color morado.
Los fieles esperan con ansias la bendición del cristo y aguardan en las calles donde realizará su recorrido con velas, flores e inciensos. También algo muy característico de esta festividad es su gastronomía distintiva, siendo el Turrón de Doña Pepa un postre tradicional adjuntado a la festividad del señor de los Milagros.
El cristo crucificado lleva el nombre de Señor de los milagros, debido a los múltiples favores y dones que ha concedido a sus fieles devotos.
Durante el año de 1655 aconteció el famoso terremoto que echó abajo toda la ciudad dejando tan solo de pie el muro en el cual se hallaba pintado, es el primer milagro reconocido de este Cristo.
Seguidamente, el año de 1671 cuando se dio la orden de borrar la pintura, y todo aquel que se acercara al muro con intenciones de dañarlo caía desmayado fue un hecho que muchos atribuyeron a obra divina, y que no era voluntad de Dios que aquella pintura fuera removida.
Tiempo después surge la leyenda de Don Antonio de León quien padecía de un mal que los médicos de la época no podían curar, y él sintiendo el llamado de Dios, acudió a Pachacamilla a darle rezos y oraciones al cristo Crucificado sanando sus males al poco tiempo y así como esta son varias las historias de personas que aseguran haber sanado sus males por obra del Señor de los Milagros.
La festividad inicia al mediodía del primer sábado del mes de octubre donde el gran lienzo se traslada desde el monasterio de las Nazarenas hasta la iglesia del mismo nombre. Lugar donde permanece hasta el 2 de noviembre, excepto los días de procesión.
El 18 de octubre se realiza la misa a las 5 de la madrugada, dando después paso a su salida en procesión por las calles de Lima a las 6 am en medio de fieles y devotos que se reúnen para acompañar al santo en su recorrido hasta llegar a la iglesia de la Virgen del Carmen, aproximadamente a las 12:30 am a 1 de la madrugada.
Posteriormente, realizará procesiones los días 19 y 28 de octubre culminando el día 1 de noviembre cuando el cristo hace su retorno al monasterio de Nazarenas, lugar donde permanecerá hasta el siguiente año.
Durante la celebración del Señor de Los Milagros también se dan otras actividades
Este escapulario tanto el de oro como el de plata son trabajos en alto y bajo relieve, de la imagen del Señor de los Milagros, este es el único reconocimiento que se otorga de manera oficial a los primeros puestos de la Feria.
Aunque la celebración es durante todo el mes de octubre, se puede visitar la imagen del Cristo en cualquier día a partir del 10 al 31 de octubre desde las 7:30 am hasta las 18:00 pm en el salón de Andas de La Iglesia de las Nazarenas.
Las principales procesiones se realizan el 18 - 19 -28 de octubre en las principales calles de Lima.
